lunes, 28 de marzo de 2011

Cambia tu frecuencia vibratoria

Te invito a que hagas este ejercicio diariamente al menos por 21 días…

Ponte frente a un espejo y mirando tu reflejo decreta lo siguiente:

Soy prospero ahora
Soy feliz y estoy en paz
Atraigo todo lo que deseo
En mi vida hay abundancia
Soy una persona entera y completa
Atraigo a mi vida a gente útil
Soy un poderoso imán para el dinero
Tengo seguridad económica
Disfruto la vida
Hay felicidad en mi vida
Tengo paz interior
Disfruto de la prosperidad
Sonrío todo el tiempo
Me entusiasma la vida
Hay serenidad en mi vida
Estoy usando todos mis talentos especiales
Tengo muchos amigos maravillosos
Tengo un empleo que me satisface
Mis esfuerzos son recompensados
 
Yo empecé haciendo estos ejercicios, sentada frente a un espejo, con una hoja de papel donde tenia escrito varios decretos, prendía una velita frente a mi y empezaba  la letanía, leía mentalmente una frase y después volteaba a verme al espejo y la decía, al principio me sentía ridícula haciendo esto, porque no me lo creía, pero lo hacia todas las noches, hasta que poco a poco las fui diciendo cada vez con mas determinación y convencimiento, y cual fue mi sorpresa que mi vida empezó a cambiar, empecé a ver resultados y cambios positivos, se empezaban a manifestar aquellos deseos que decía con fuerza y convencimiento frente al espejo, como olvidar ese decreto de mi trabajo es reconocido y valorado por mis compañeros y mis superiores cuando al poco tiempo, en una junta, mi jefe, al que antes yo no le caía bien, me reconoció delante de todos que estaba muy contento con el trabajo que yo estaba haciendo wooooooww. Increíble pero cierto, ahora mi jefe me valora, me da mi lugar… créanme no existe otra manera de explicarlo…


Después aprendí que no solo tenia que hacerlos frente al espejo o con una velita prendida, eso me ayudo mucho si, pero ahora se que funciona también si lo digo o lo pienso cuando voy caminando, cuando me baño, cuando voy en el camión o en el metro, cuando trapeo, cuando barro, cuando limpio mi casa, cuando lavo mi ropa, cuando me acuesto a dormir, etc., cualquier momento es bueno

Y ahora he aprendido a hacer yo misma mis propios decretos, es solo cuestión de manifestar lo que deseamos, de dar gracias por lo que queremos obtener…
...

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